1. La dieta y la Corea de Huntington
La universidad de Columbia ha hecho un estudio con 1110 Canadienses y Estadounidenses que ha demostrado que la dieta mediterránea no contribuye a un retraso en la progresión de la Chorea de Huntington.
2. HDAC4: Una nueva diana terapéutica para evitar la neurodegeneración
La Histona deacetilasa 4 (HDAC4) participa en la represión transcripcional. Esta proteína se asocia a la Huntingtina y su interacción depende del tamaño de la región de polyglutamina. Si se reduce la concentración de esta proteina, la agregación aparece de forma más tardía. HDAC 4 se ha convertido en una nueva diana terapéutica.
3. La concentración de potasio en el cerebro puede ser la clave de la lucha contra la Corea de Huntington
Investigadores de UCLA han examinado la interacción de astrocitos con neuronas implicadas en la coordinación de movimientos descubriendo que la concentración de proteína Kir4.1, implicada en el transporte de potasio a la célula, se ve disminuida cuando la huntingtina está alterada. Al transferir esta proteina a ratones enfermos, estos mejoran su habilidad para andar.
4. La eficiencia en la destrucción de proteínas neurotóxicas contribuye al progreso de la enfermedad de Huntington.
Instituciones de Gladstone han descubierto que las neuronas del cerebro eliminan las agregaciones de huntingtina mutada con diferente eficacia.
Las neuronas del estriato son muy sensibles a las alteraciones en autofagia y se ha visto que cuando se inyecta Nrf2 de manera artificial en neuronas del estriato, los procesos de autofagia se aceleran y la supervivencia celular se prolonga.